
la campaña publicitaria que ha implantado la derecha acá en Osorno ha sido un desastre. y no lo digo solo porque me cargue la derecha, lo digo porque es verdad. La ciudad se ha llenado de basura, y carteles de Frei o de meo no he visto prácticamente nada. Aparte, los brigadistas que trabajan en el comando de los candidatos Javier Hernández de la UDI y Harry Jürgensen de RN son unos patudos cara de raja. Llegan y pintan los muros como si fueran de ellos y ni se inmutan si hay ya algo pintado ahí. La Brigada Ramona Parra vino hace algún tiempo a hacer un precioso mural acerca de los derechos del niño en una avenida de Osorno. Había quedado impresionante. Llegaron los partidarios de Hernández y le metieron mano como unos asesinos, cubriéndolo de pintura azul y amarilla, causando conmoción e impacto en la opinión publica ante la desfachatez con la que actuaron.
Pero lo más grave, curioso y ridículo tiene que ver con la rivalidad que existe entre Jürgensen y Hernández. Ambos de la misma coalición. Bonita la guea. Quieren gobernar chile y no son capaces de gobernarse ellos mismos. No se que onda entre ellos dos, se tienen terrible de mala. y esta rivalidad ha provocado una especie de guerra entre comandos, guerra que por supuesto ni a ti ni a mi ni a nadie le importa, pero que igual nos afecta. Los del comando de Hernández van y le rompen los carteles a Jürgensen y los del comando de Jürgensen van y le rompen los carteles a los de Hernández. Se producen peleas callejeras así como las de los hooligans, pero golpeándose con los mismos carteles. Dicen que en el comando de Hernández por cada cartel de Jürgensen que uno se robe y lo vaya a dejar allá, pagan $1000. Bastante poco por lo arriesgado de la misión, teniendo en cuenta que ahora los del comando de Jürgensen han contratado a una montonera de flaites armados con los tremendos garrotes para cuidar sus carteles. Algunos en todo caso, no son tan flaites. Se nota que vienen de la cota mil, por la papa en la boca y que los mueve su espíritu partidista.
Así, las calles de Osorno se han vuelto más inseguras. si vas caminando por la vereda y uno de esos flaites te ve muy cerca de un letrero, va y te echa las paradas. No puedes caminar tranquilo, pensando en que cualquier matón de esos te puede agarrar a coscachos. Puros delincuentes, paradójicamente apoyando a ese movimiento político que dice que le "va a ganar a la delincuencia". Puede ser, también, que a estos compadres les paguen, y muy bien, como para estar todo el día con cara de malo y un garrote cuidando un común y corriente letrero (y tienen que ser unos gallos muy vagos en su vida), pero entonces eso quiere decir que esa postura de la derecha de que van a acabar con la delincuencia no es tan sincera tampoco, porque igual siempre necesitan sicarios que les hagan el trabajo sucio.
Solo queda esperar a que termine todo esto. La gente, a estas alturas del partido, creo que tiene claro por quien votar, y aparentemente, casi un 70% de los chilenos va a optar por no estar ni ahí con el ya aparentemente inevitable próximo presidente. Así que no se de que sirve tanto hueveo publicitario. Guarden su plata mejor, para pagarle a los sicarios de las presidenciales del 2014. Ahí, los van a nesecitar.