lunes, 16 de febrero de 2009

el FrIKi que llevo dentro


Para hacer este post, recordé a Yuyin, ex compañero de educación media durante cuatro años, tiempo en el que me dedique a entender, atender y comprender el por que de su afición a la cultura pop japonesa, desde sus gustos musicales, pasando por los manga anime, también por su hobbie de jugar cartas magic y hasta su gusto por aquellos videos en donde Goku se folla a Bulma(omitan lo ultimo). El hecho es que no podía entender cual era el hechizo, cual era el brillo que se le podía dar a lo japonés como para hacer que huevones de cuarenta años se disfrazaran de Saylor Moon y además sin ni siquiera afeitarse las piernas o quitarse el bigote, digo yo para verse un poco mas decente(o mas sexy para los depravados que hacen esas gueas), o que un compadre sin identidad cultural vayan al diario de Eva y se hagan llamar “Toshiro” y se pinten los ojos para parecer japonés, o que pobres inadaptados se dediquen a aprender a hablar japonés para según ellos irse de este país tercermundista y vivir en un edén en donde las chicas colegialas son fácilmente violables o que por la calle te puedes encontrar a Pikachu o a Inuyasha bailando “para – para”… o sea Japón…

Y todavía no comprendo. Y es que el anime es muy bueno. Yo me recuerdo cuando pendex estar pegado tardes enteras al televisor angustiado porque Majin Boo le estaba ganando a Goku e iba a destruir el planeta, o porque Oliver aton tenia que hacer el gol del campeonato mundial, pero de ahí a fanatizarme hasta el punto de comenzar a saludar al resto de la gente con un “konishiwa” o un “¡que onda!” con la mano alzada y cerrándote un ojo al mas puro estilo Arale(creanme que me he topado con huevones asi)… nooo… eso es como mucho, demasiada la idolatría. Porque aparte de ese mítico japonés que cantaba el “guatón Loyola”, ningún otro nipón nos pesca a nosotros los pobrecitos chilenos…

Y bue… así paso el tiempo en que mi vergüenza ajena por estos tipos se fue disparando. Para mí, Japón era el país que estaba al otro lado del mundo. Nada más. Un pedazo de islita toda cagada y abarrotada de gente comiendo perro, trabajadores esclavizados, financistas estresados y cauros de quince años suicidándose cada quince minutos (lo cual aparentemente no es tan terrible para ellos, teniendo en cuenta que los japos son mas calientes que tu hermana y se la pasan agrandando la taza de natalidad). No estaba ni ahí con ellos. Si quería ver un país con compadres rayados, los yanquis estaban mas cerca.

Entonces mi curiosidad me llevo a investigar su música. Y llegue a dar con una tonelada de artistas… Morning mussume, Ayumi Hamazaki, Mr.Children, Koda Kumi… etc.… Los escuche y realmente me decepcione de lo mierda que eran sus canciones... Sin entender nada de sus letras, la música lo decía todo: era como escuchar “pluma pluma gay” a cada rato(o lo que canta ahora jorge González, esa guea tan fleta del “aviador”)… todos los temas con los mismos efectos, la típica voz chillona de las minas que tanto excita (pa`mi que detrás de esa voz se esconde una gorda grasienta toda hedionda, pero la imaginación es mas fuerte)… los hombres todos cantaban igual, como queriéndose imitar unos a otros… tan comercial que faltaba que al medio de la canción digan “coca colaその他>その他 coca cola その他>その他”… los videos peor aun… cantantes medios gays, coreografías ridículas… era como ver a una montonera de Nelson Mauris pero con ojos rasgados.

Y mande a la mierda a Japón. La música era lo que mas me interesaba descubrir de ese país, y era una cagada. Y caí en las típicas estigmatizaciones: Japón + anime + música jpop + computador + dificultades de hacer vida social = OTAKU DE MIERDA. Y asi huevie a mi amigo japoadicto durante bastante tiempo, y el, extraña y afortunadamente nunca me hizo caso, y vaya que me merecía un combo en el hocico.

Pero hace muy poco que vengo cambiando mi forma de pensar. Hace algún tiempo encontré a una cantante japonesa que se llama AIKO. Hubo algo que me llamo la atención de aquella artista. Era bastante más pegajosa que todo lo demás que había escuchado. Y eso era raro… muy raro… Esta era algo distinta. Su apariencia era baja, un cuerpo no tan deseable como las demás, aunque mantenía su rostro tierno y la voz algo chillona. Era bastante bonita, después de todo. Su música era distinta, más simple y sin tanta parafernalia. Su manera de cantar también muy natural. Todo esto hacia que la canción sea mucho más pegajosa. En algunas canciones me acorde de Fito Páez, por la suavidad de las notas del teclado y los samples como de mañana de primavera.. No era tan rockera como lo pudo haber sido L'Arc~en~Cielen, o tan pop como lo es Ayumi Hamazaki... reemplazaba mucho el ruido de guitarras eléctricas por la suavidad de los pianos. Ella misma incluso supe que tocaba el piano. Variaba, a veces sus canciones eran de melodías muy alegres, mientras otras muy melancólicas pero hermosas. En fin... me llamo la atención, y creo que hasta me gusto un poco. Igual me dio una sensación de culpabilidad e incluso llegue a sentirme un poco estupido. Yo, tan orgulloso, incapaz de escuchar cosas tan comerciales, me veía ahí, vibrando con ella (allá en Japón es comercial casi todo lo que uno canta) yo, quien creía a la gente que escuchaba esta música como la mas freak del mundo, me veía hipnotizado con la canción de una artista japonesa. Al fin, me di cuenta de que era solo una artista, y que la música japonesa, aunque en su mayoría una mierda, excepto Aiko, era solo eso: música. No se que tanto atado. Los otakus o fanáticos del anime no son tan freaks tampoco. Los tratamos de antisociales, raros y de estilos de música ridículos, pero igual no escuchan nada del otro mundo más que música. En japonés, pero música después de todo. Porque al fin y al cabo, todos llevamos un friki, un otaku reprimido dentro de nosotros. lo importante es escuchar, hacer o admirar lo que a uno se le plazca, para estar bien(eso no dice que los huevones que se visten de mono animado sean compadres muy normales tampoco…).

Total, es solo música. Si Lennon hubiese nacido en Japón, la única diferencia seria que sus canciones serian en japonés (y afortunadamente no habría conocido a yoko ono, quien andaba hueviando en Inglaterra… ah… y tendría los ojos rasgados... obvio... o tal vez llegando a los quince años se habría suicidado...)

Y esa es mi historia. Aquí les muestro una canción de mi amor platónico, Aiko. Ojala te guste, ocioso de mierda que visitas mi blog. Y si no, ojala vaya un japonés a tu casa y se coma a tu perro.

al fin y al cabo... en este blog se habla de cualquier guea.